En los tiempos que corren, mantener una reunión face to face (cara a cara en español) ya no es necesario. Hoy contamos con los tan amados audios de WhatsApp, con videos llamadas y con aplicaciones que simulan ser una mesa de trabajo en línea, entonces, ante este escenario: ¿Es necesario que nos reunamos?
A mi entender, es un tema generacional, a medida que me voy encontrando con clientes de menos edad veo cómo se va agilizando la comunicación tornándose un trabajo muy práctico y sencillo el hecho de intercambiar ideas y llevarlas a cabo. Con gente de mi edad – 33 años – y más o menos años solo nos reunimos la primera vez para generar ese lazo de confianza que aún sigue siendo necesario para establecer una relación comercial, para luego mantener viva la amistad solo a través de mensajería instantánea.
Con los tiempos apretados, la escasa capacidad en la agenda semanal, sumado a que queremos trabajar menos y distendernos más, hace que encontrarnos en persona con nuestros clientes o proveedores sea cada vez más inviable. Nadie niega que el hecho de vernos frente a frente ayuda a mantener una relación más cercana y seguir fortaleciendo ese lazo de confianza tan indispensable en un proceso de venta, no obstante, quita tiempo propicio para dedicarle a otros asuntos.
y vos, ¿cómo resolvés tus encuentros comerciales?
(*) Lic. en marketing.