No importa si la compra se realizó a través de una red social, un sitio web con e-commerce o WhatsApp, los clientes digitales queremos 100 por ciento comodidad: si compramos desde la comodidad de nuestros hogares, queremos que nos envíen la compra a nuestros hogares, es sencillo.
Sin embargo, este último y tan importante paso, parece no quedarles claro a muchos emprendedores que se han abierto camino en el comercio digital, y es que tengo sobradas pruebas de lo que digo. Sin dar nombres, claro, hace muy poco tiempo compré a dos comerciantes locales uno de sus productos vía WhatsApp y a ambos tuve que ir a buscarlos a sus casas porque me manifestaron no tener movilidad. Uno de ellos me quedaba de paso, pero de igual modo me ofuscó bastante tener que desviarme de mi camino habitual para resolverle un eslabón de su cadena comercial, no de la mía.
A esta altura, donde puedo comprar un clavo en plataformas como Mercado Libre y me lo envían a mi casa, no podemos siquiera darnos el gusto de pedir compras mínimas para que se envíe a domicilio, incluyámoslo en el pago final, a cargo del cliente, pero brindemos el servicio completo.
Si vas a vender en línea, no importa cuál sea el canal, tenés que saber que el envío – a donde el cliente nos diga – es requisito fundamental de este circuito de venta tan popular. Caso contrario: abrite una tienda física.
Espero haberte sumado un dato comercial para tu negocio. Hasta la próxima.
(*) Lic. en marketing.
